Alejandra Romero: Una florista para destinos de ensueño






El cultivo sostenible, la delicadeza en el diseño y el negocio de los eventos boutiques son algunos de los secretos que Alejandra Romero, la maestra de las bodas de destino en Granada, nos adelanta de su participación en MADRID BLOOMS.

¿Cómo comenzaste en el mundo del diseño floral?

Las flores llegaron a mi vida en un giro de acontecimientos que ni yo misma esperaba. Vine a España por un corto periodo de tiempo a estudiar un Doctorado en Paz, Conflicto y Democracia, pero la vida tenía otros planes para mí. Encontré el amor y sufrí una serie de pérdidas familiares que me llevaron a tomar la decisión de quedarme y con ello me planteé un momento de cambio radical en mi vida.

Siempre tuve inquietudes artísticas y creativas, así que explorando nuevas posibilidades, me encontré con el arte floral. Descubrí un mundo absolutamente apasionante y en las flores un instrumento para expresarme y crear con uno de los elementos más bellos de la naturaleza. Fui consciente del privilegio que ello significaba. No lo pensé ni un segundo y empecé con mi formación de técnica básica. Después de un corto periodo como freelance en el mundo de las bodas, empecé con mis propios proyectos.

Mi primera boda fue en el año 2017 y casualmente fue una boda de destino. A través de Instagram me contactó una pareja venezolana que venía a Granada a celebrar con su familia más cercana su enlace. Las flores debían ser un detalle discreto pero significativo, recuerdo haber utilizado diferentes tipos de orquídea como un guiño al trópico. Esta primera experiencia me llenó de optimismo, de entusiasmo y me abrió las puertas a un camino que aún continuo recorriendo.

¿Existen temas, colores o elementos específicos a los que te sientas atraído repetidamente en tu trabajo? 

Con el paso del tiempo me doy cuenta de que el hilo conductor de mi trabajo es el concepto de la delicadeza. Es mi forma de entender mis diseños, sin importar el estilo, los colores o los tipos de flor. Tiendo a crear a partir de lo que entiendo como natural, orgánico, fluido, equilibrado y definitivamente delicado.

¿Quiénes o qué son tus principales fuentes de inspiración en el mundo del diseño floral? 

Aunque naturalmente me atrae el garden style y admiro a artistas como Liz de Siloh Floral o Madison de Hart Floral, también sigo de cerca perfiles de estilos distintos como al colectivo This Humid House, Art Petrov o Lisa de DoctorCooper. También tengo la suerte de rodearme de amigos floristas de los que aprendo, a los que admiro y me inspiran mucho! 

¿Hay otros artistas o diseñadores, no necesariamente en la industria floral, que inspiren tu trabajo? 

La inspiración viene de todo lo que me emociona, de las cosas que siembran en mi inquietudes que luego se traducen en diseños o hilos conductores de mis proyectos. Esto es muy cambiante, depende de cada etapa que estoy viviendo a nivel personal, de mis intereses o mi estado de ánimo. No bebo siempre de las mismas fuentes.

Desde la naturaleza, la danza, el arte y la fotografía hasta la moda o la pastelería, por ejemplo. Ahora mismo, me siento muy atraída por el trabajo de Jessica Sale, una pastelera inglesa exquisita que me inspira con sus formas, sus procesos, su técnica y su estética. De otro modo, me inspira profundamente el trabajo de Ruven Afanador, un fotógrafo colombiano que con enorme sensibilidad hace retratos que te abren puertas a otros mundos.


¿Cuál ha sido la experiencia de aprendizaje más significativa en tu trayectoria como diseñador floral? 

El diseño floral ha roto en mi vida muchos esquemas. Jamás me hubiese imaginado emprendiendo mi propio proyecto empresarial, simplemente porque el mundo de los negocios no era lo mío (y honestamente sigue sin serlo). Pero he aprendido que todo es un proceso que tiene una curva de aprendizaje donde la persistencia es la clave. Tanto a nivel de negocio, como de diseño floral en sí mismo, he aprendido a asimilar que los errores y la capacidad de autocrítica para identificar todo lo que se puede hacer mejor, es parte fundamental del crecimiento. Al principio estas ideas me generaban mucha frustración, ahora asimilo que es una inevitable parte del camino y construyo constantemente herramientas que me ayudan a lidiar con ello.

Por ejemplo, la logística y la producción de cada evento es un desafío al que no podría enfrentarme sin una organización muy clara y mucha comunicación con mi equipo. O a nivel de negocio, ha sido clave definir mi estrategia, mis objetivos a corto y mediano plazo y hacer el enorme esfuerzo de mantenerme alejada de todo lo que no me aporta en este sentido.

"Siempre tuve inquietudes artísticas y creativas, así que explorando nuevas posibilidades, me encontré con el arte floral".


¿Podrías destacar uno de tus proyectos de diseño floral favoritos y qué lo hizo especial para ti? Cuál ha sido tu último trabajo? 

Uno de mis primeros proyectos fue el montaje de una instalación aérea con cientos de flores y hortalizas suspendidas del techo de un stand, en la Feria Fruit Attraction, para una empresa de horticultura de la costa de Granada. Fue muy significativo para mí porque era la etapa inicial de mi proyecto y desde luego un reto enorme. El resultado fue espectacular, el cliente lo valoró mucho y me siento muy orgullosa de ello.

Mi último trabajo del 2023 fue quizá uno de los más especiales que he hecho hasta ahora. Una pareja inglesa decidió casarse en el Palacio de los Córdova de Granada y quiso transformar el espacio de la ceremonia en un jardín lleno de flores, con un pasillo curvo de más de 50 metros de largo. Junto a un grupo de profesionales excelentes, de todas las áreas, creamos un cuento de hadas para una boda íntima de apenas 20 invitados donde las flores jugaron un papel destacado en la experiencia de novios e invitados.

¿Hay algún evento o cliente que destaque en tu memoria como especialmente gratificante? 

Mi experiencia en el Festival Flora 2017 fue reveladora como florista y la recuerdo como especialmente gratificante. Trabajé como asistente en el proyecto de Isabel Marías con un intenso aprendizaje que pasó por lo floral, como aprender de su sensibilidad, su visión y su técnica, pero también me enseñó sobre el compromiso, el trabajo en equipo, el apoyo y el esfuerzo conjunto que implican instalaciones de tan enorme envergadura. Fue muy emocionante hacer parte de ello.

También tengo que destacar otro aspecto fundamental y fue que conocí a muchos de mis amigos floristas con quienes mantengo relación hoy en día y han sido y son, sin duda, parte de mi red de apoyo en lo profesional. Qué importante es crear espacios como estos, donde podamos crecer juntos en tantos aspectos. Madrid Blossom será sin duda alguna, otro momento memorable en este sentido.

¿Existen tendencias emergentes o técnicas innovadoras que encuentres especialmente emocionantes?

El uso de textiles integrados con flores o las esculturas vegetales en las decoraciones de eventos creo que son una tendencia fuerte para los próximos años. Me gusta mucho “traer” a mi terreno, a mi propia interpretación las tendencias. Lo encuentro retador y emocionante.

¿Qué prácticas sostenibles específicas incorporas en tu trabajo diario como diseñadora floral? 

Soy muy consciente de la deuda que tenemos como floristas con el medio ambiente por las altas cantidades de residuos que generamos, muchos de ellos no biodegradables. Tengo mucho que recorrer en este aspecto. A día de hoy, incorporo el uso de Kenzan o malla de gallinero para todos los trabajos en los que me es posible, favorezco en mis diseños el uso flor de temporada y de cultivo local.

¿Cuando las personas disfrutan de tus diseños florales, ¿qué mensaje o emoción esperas que se lleven? 

El mundo de los eventos, pero en particular el de las bodas, es un mundo lleno de sensibilidad. Mi trabajo hace parte de una puesta en escena muy trabajada, muy pensada y muy esperada por una pareja. Todo debe salir lo más cercano posible a la perfección. Siempre quiero que mi trabajo hable de delicadeza, de belleza y sobre todo, que transmita todo eso que hemos ido madurando con la pareja a lo largo del tiempo, quiero que transmite autenticidad.

@alejandraromero_floralstudio | alejandraromerofloral.com

Alejandra será una de las diseñadoras en MADRID BLOOMS el día 21 y 22 de febrero 2024.

Alejandra Romero: Una florista para destinos de ensueño